Aceptémoslo, no es que no tengamos qué ponernos; sino que probablemente no sabemos dónde encontrarlo. Estamos en el último mes del año y es tiempo de que organices tu closet
- Guarda la ropa donde debe estar
Recoge todo lo que no tiene un lugar específico y ponlos sobre tu cama. Una vez que termines devuélvelo a su espacio correspondiente.
- Sácalo todo
Así como es importante elegir qué vas a conservar y donar; también es recomendable limpiar los compartimientos de tu clóset, para que se mantenga nítido y ordenado.
- Deshazte de lo que está dañado
Un consejo para limpiar tu clóset es ser objetiva y reconocer cuáles son las prendas que ya no tienen arreglo. ¡No las conserves!
- Dobla la ropa más pesada
Las prendas como suéteres o pantalones de jeans pueden causar demasiado peso en tu armario. Opta por doblarlos para tener un clóset más organizado.
- Considera qué puedes donar
Esa ropa que simplemente ya no usas ocupa espacio en tu clóset. Mejor dona a alguien que realmente la necesite. Si no te convence, también puedes venderlos para tener un ingreso extra.
- No desperdicies el piso
Un consejo para un clóset más organizado: usa el piso para almacenar tus zapatos. Ya sea que pongas tus zapatillas o sandalias; aprovecha este espacio al máximo.
- Encuentra el orden para ti
No importa si prefieres ordenar tu ropa por temporada o por colores, lo importante es que encuentres el sistema que funciona para ti. Apégate a él y realmente mantén limpio tu clóset.
- Evita la nostalgia
Evita apegarte a prendas que te traen un buen recuerdo o crees que volverán a estar de moda. ¡No acumules!
- Sigue la regla del 1×1
No salgas a comprar un nuevo vestido hasta que no te deshagas de alguna otra prenda. Sé realista, ¿realmente necesitas tanta ropa?